Insensatos.
Deberíamos pensar en la cantidad de cosas que deseamos que podrían tener resultados dramáticos.
“¿Por qué no revienta este estúpido?”.
¿¿Te imaginas
que en ese momento realmente “reviente”??
Ya no te hablo del susto y el estropicio que se montaría con todo el mundo reventando a cada rato. Sino… ¿Y las familias de los reventados? ¿Qué explicación les damos? Que a ti te han dicho “que se cumplan todos tus deseos”?? Así que la culpa no es tuya?????
¿Tu mismo lo
deseas y tu mismo revientas?
No tiene lógica NINGUNA.
No tiene lógica NINGUNA.
¿Nunca has
estado en una reunión muy aburrida y has deseado:
“Uf, ojalá
desaparecieran todos y pudiera quedarme tranquilo un rato”?
Y todavía
agregas “un rato” ¿Te imaginas que “al rato” aparezcan todos de nuevo de
sopetón?????? Sin ni siquiera desearlo??
¿Has pensado en
el caos que serían los partidos de fútbol, si cada vez que lo deseamos, el
entrenador del equipo tuviera que hacer los cambios que “deseamos”?
No darían los
MILISEGUNDOS de partido para hacer los cambios de todos. Los jugadores no tendrían tiempo ni de patear la pelota.
O que al
árbitro, cada vez que alguien le grita “Hijo de p…”, su madre se trasforme en
una meretriz sin motivo aparente??
La mujer está
cocinando un guiso tranquila en su casa y de pronto… flas! Se trasforma en una prostituta sólo porque tu no has aprendido a controlar tus deseos???
Y para nada…
porque no has deseado “que Dios te oiga y
LUEGO cumpla tus sueños”.
No.
Específicamente el deseo fue: “Que Dios te oiga”. Sin más. En plan “cotilla”.
Yo, por
ejemplo, deseo ganar la lotería. Pero yo y todos. ¿Te imaginas que la ganáramos
todos???
De pronto
todo el mundo millonario? Nadie barre, nadie limpia, nadie trabaja… no hay
cafeterías, ni hospitales, ni escuelas, ni luz, ni agua, ni ciencia?
Porque seamos
honestos… si mañana somos todos millonarios acá no trabaja ni cristo (porque
con todo respeto, el padre, porque era carpintero… pero… ¿Y si hubiese sido
millonario??)
Hay que tener
cuidado cuando uno va deseando por ahí “que
se cumplan todos tus deseos” sin ton ni son.
Yo no se lo
desearía ni a la virgen María. A ver si por despecho se va a poner a desear que todas las mujeres se queden embarazadas por la gracia del espíritu santo… del
espíritu santo del cotilla del marido, un carpintero millonario que se pasa todo
el día oyéndonos, por “oír” nomás.
Que Dios me
perdone (ya que me oye)
Yo a partir
de ahora voy a especificar un poco más a la hora de dar mensajes de año nuevo.
“Que en el 2013 se cumplan todos tus
deseos (siempre y cuando no hagan daño a nadie, que no los desees en momentos
de ira, que no circunscriban a la Virgen María ni a la lotería y que no comprendan
los términos “reventar”, “desaparecer” ni “hija de… nadie”). *
* No acumulable
a otros deseos.
* Válido para 1
persona por año.
* Plazas
limitadas (por si acaso).
LA PRIMERA RECETA DEL AÑO: PAN.
(Para recordar siempre que no hace falta complicarse mucho la vida para ser feliz).
A falta de un
gran pedazo de tierra me he empeñado en tener un huerto mi terraza.
Zanahorias,
rábanos, grelos, remolachas, tomates, ajos, albahaca, menta, cebollines,
orégano, espinacas, aloe… sólo hace falta tierra, agua y armonía.
Me ha dado
qué pensar. La vida está deseando crecer en cualquier lado. Vamos a ayudarla
¿no?
Entusiasmada
por mis “cosechas” y la vida más natural que Barcelona me permita, para fin de
año he hecho pan casero:
500 g. de harina de espelta integral.
500 g. de
harina de maíz integral.
100 g. de
levadura de panadero (que previamente dejé reposar con 1 taza de agua mineral
tibia durante 15 minutos)
Dejé reposar una
hora y luego he vuelto a amasar y amasar y amasar.
Agregué semillas
de lino y sésamo tostado, llevé al horno y al cabo de lo que la intuición me ha
dictado… estuvo listo.
Aunque desde
luego no todos (por el amor de Dios).
Que aproveche.