Admiro profundamente la simpleza mental masculina.
Comen y en su mente hay “patatas”.
Practican sexo y en su mente hay… quién sabe, mejor no preguntar.
Cuando juego a la consola pienso en cuánto tiempo tendrá que pasar para que alguien me quite el mando de las manos y así poder irme a hacer todas esas cosas lindas que me gusta hacer en la vida real.
No pretendo hacer una crítica, lo cierto es que la naturaleza masculina despierta en mi una gran admiración.
Me encantaría alguna vez tener la capacidad de ver a “la misma persona de siempre” en lugar de ver a “la misma persona de siempre con un peinado nuevo”.
Pero soy mujer. No puedo. La complejidad es mi hábitat natural.
Tapé la olla y a los 10 minutos de hervir lo batí todo con tres cucharadas de perejil fresco picado, una pizca de sal y pimienta negra.
Por otro lado doré, en dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 10 champiñones grandes a los que quité el tronco.
Esa forma tan peculiar de focalizar su atención específicamente en “eso que hacen” y lo más fascinante… sin pensar en nada más.
Comen y en su mente hay “patatas”.
Ven un partido de fútbol y en su mente hay “pelota”.
Juegan a la consola y en su mente hay “tiros”.
Trabajan y en su mente hay “gestiones”.
Practican sexo y en su mente hay… quién sabe, mejor no preguntar.
Cuando yo como pienso en tantas cosas, que a la media hora de terminar, puedo llegar a descubrirme a mi misma frente al plato vacío y lamiendo el tenedor sin siquiera recordar qué es lo que estoy haciendo allí.
Cuando miro fútbol pienso en todos los programas alucinantes que me estoy perdiendo por ver una pantalla verde con veintidós iluminados pateando una pelota durante noventa minutos.
Cuando juego a la consola pienso en cuánto tiempo tendrá que pasar para que alguien me quite el mando de las manos y así poder irme a hacer todas esas cosas lindas que me gusta hacer en la vida real.
Cuando trabajo pienso en un conjunto tan grande de cosas que a veces creo que, más que una persona con personalidad múltiple, soy un conjunto de 158 personas demasiado unidas con un extraño complejo de unipersonalidad.
Y cuando practico sexo imagínate, hablábamos de 158 personas todas desnudas en una habitación, así que puede llegar a ser una orgía tan grande que casi no me entra en la cabeza (casi).
No pretendo hacer una crítica, lo cierto es que la naturaleza masculina despierta en mi una gran admiración.
Ojalá yo pudiera emplear un cuarto de las palabras que utilizo para expresar mis sentimientos sin siquiera pensar en que “el otro” no va a entender nada si no me explico mejor.
Me encantaría alguna vez tener la capacidad de ver a “la misma persona de siempre” en lugar de ver a “la misma persona de siempre con un peinado nuevo”.
Lo que daría por tener la habilidad de abstraerme de todo mirando una pantalla verde durante una hora y media.
Ojalá yo también pudiera trazar una línea recta entre mi persona y la realidad sin considerar para nada los millones de matices que pueden estar interviniendo en el medio gracias a una compleja red de sentimientos ineludibles.
Pero soy mujer. No puedo. La complejidad es mi hábitat natural.
¿Cómo me explico?... Si yo poder simplificar mí, lo haría. Y yo intentar, pero tú notar que yo exagerar punto y tal vez enfadar. No enfadar. Tú ser un encanto como tú ser. Yo sólo escribir. No querer decir nada. Ser broma. Tú reír. Que vida ser corta.
Yo ahora cocinar.
CREMA DE VERDURA Y OMELETTE DE CHAMPIÑONES.
En una olla coloqué un fondo de agua mineral y:
Media calabaza pequeña.
Una patata pequeña.
Una zanahoria.
Una cebolla.
8 judías verdes.
Tapé la olla y a los 10 minutos de hervir lo batí todo con tres cucharadas de perejil fresco picado, una pizca de sal y pimienta negra.
Cuando lo serví le coloqué encima unos piñones que previamente tosté en una sartén sin aceite y unas semillas de sésamo tostado. El aroma tostadito de los piñones le da un toque increíble a esta crema.
Por otro lado doré, en dos cucharadas de aceite de oliva virgen extra, 10 champiñones grandes a los que quité el tronco.
Mientras se doraban sofreí todos los troncos con media cebolla en otra sartén, lo piqué todo muy pequeño y agregué 4 huevos, sal, pimienta y un toque de orégano.
Lo revolví bien e hice un omelette (tortilla francesa). Pero no la di vuelta sino que la dejé con la forma de la sartén.
Cuando la serví puse la tortilla en el centro de la fuente y por encima coloqué los champiñones. Dentro de cada uno puse una cucharadita de queso de cabra y decoré con unas tiritas de pimiento rojo y cilantro picado.
Espero que tu gustar…. quiero decir…
que aproveche :-)
que aproveche :-)
43 comentarios:
excelente descripción!me ha gustado MUCHO!
un abrazo,enorme,
lidia-la escriba
Tu misma lo dijiste querida amiga, simpleza es lo que nos diferencia. Cuando un hombre te dice algo, te quiso decir solamente lo que te dijo. Cuando una mujer dice algo probablemente quiera decir otra cosa. Soy las reinas de las indirectas.
Como siempre, muy divertido pasar por aquí.
Un beso.
Ayer un amigo especial me pregunto que opinaba sobre la igualdad de los sexos....le dije...no creo que jamas pueda haber igualdad porque nosotras tenemos algo que ellos no tienen (y no es eso)...tenemos la capacidad de administrar rodo lo que se refiere a nuestro hogar sin dejar de ser femeninas...eso es lo que nos distingue...el poder tener sensibilidades que ellos no pueden tener...ese sexto sentido que nos prepara para cualquier situación, tenemos un vocabulario extenso para decir lo que quizás ellos digan en 3 palabras pero no saben igual, podemos dar consuelo y acariciar como nadie, nos fijamos en todos los detalles y si nos dieran el mando de un país lo haríamos salir de su crisis en un tris...porque aunque ya la gente se olvidó, las mujeres fuimos las primeras agrónomas, doctoras, ingenieras, nosotros cuidábamos el terreno, cocinábamos, sembrábamos y descubrimos quizás hasta el fuego mientras los hombres se iban a cazar y pelear con otras tribus....asi que vamos a dejar que sean ellos los que deseen parecerse a nosotros..yo me siento bien siendo una mujer...besitossss niña, siempre traes cosas lindas a tu blog
jejeje...acabo de leer que Guille dijo que somos las reinas de la sindirectas...creo que ellos empiezan a pisarnos los talones..
y ellos ser adorables! sólo piensan en cazar al mamut y luego comer y tener sexo, las tres cosas en cualquier orden que sea.... sus ojos son como los del águila, miran sólo su objetivo... nosotras ser múltiples, como dijo Mirella, desde la caverna miramos todo el entorno, estar atentas, cuidar, esperar, preparar, atender, cocinar, disfrutar.....nuestra mirada es hacia el mundo que nos rodea.... una delicia tu cocina de hoy, como siempre!
Ayayayayay...a ver si alguno que otro se va a sentir ofendido...¿imaginas?
No sabes cómo coincido contigo en este asunto. A mí también me gustaría enfocarme en una sóla cosa en todas las etapas de mi día. La vida sería más sencilla pero...¿sería por ello más placentera?
Esa es una cuestión que no creo pueda llegar a responder nunca.
Ahí te dejo la pregunta para que reflexiones sobre ella y, auién sabe, quizás te animes a escribirnos una entrada.
Mil besos :)
Sí, yo ahora mismo tengo aquí a un hombre y a un preadolescente viendo el partido y diciendo tacos cuando su equipo no marca, en finsss, ver para creer y entender
Sin ánimo de ofender, ¿no les faltará un hervor?.
Me impresiono lo de 158, jjajaja- <otro que ma ha casusado gracia es el comentario de Guille, te recomiendo blog de Lucrecia Borgia, donde explica lo que buscan y lo que dicen. Del omelette me llego el aroma, la otra receta no la probe nuncca, Un abrazo
Siempre disfrutando a mares tus comentarios y aunandome a ellos, y tu cocinar para que decir, una delicia, que tengas lindo fin de semana,
Hola Papámba.
Me gusta leerte porque puedo reflexionar y reír mientras se me hace agua la boca. . . ¡Buenísima entrada!, muy original.
Besos.
Pd:
Yo también querer ser como ellos, ¡jaja!
Yo, fíjate si soy poco simple, que hasta en las introducciones de mis entradas me enrollo de lo lindo, y luego pienso: "Si puede que mi esfuerzo caiga en saco roto y que solo admiren la foto y se acabó". Pero aún así, yo vuelvo a la misma, y me vuelvo a enrollar, y vuelvo a plantearme lo mismo. No soy simple, nada, y es verdad que hay ocasiones en que me tiro de los pelos y pienso en comprarme unas neuronas que me simplifiquen la vida, pero no.
"La complejidad es mi habitat natural". Me gusta esta frase, ¿Carol?
Verduritas en crema. Ahí sí que te has simplificado, ¿ves? Y de segundo una tortillita. ¿Puede ser un menú más sencillo? Seguro que sí, que lo habrá, pero mejor me callo para no complicar las cosas. Que me lío, je je je.
¡Feliz domingo!
QUERIDA AMIGA, te leía y mientras por aquello de que podemos leer la LETRA GRANDE y tambien LA PEQUEÑA, pues pensaba que todo lo que has escrito podía haber salido de mi PENSAMIENTO, de mi SENTIMIENTO, de mi DOLOR, de mi DESENCANTO, de mi DESCONFIANZA, para terminar pensando que de que me sirve a mí mostrar tantas cosas, si puede que ni me entiendan.
En fin cariño, que ESTOY CONTIGO, y a la vez estoy CON TODOS.... QUE REMEDIO:)
Bueno quizas de la simplicidad que tienen los hombres sea muchas veces lo que nos atrae o lo que nos separa, son mucho más primitivos que nosostras, y la receta que hemos publicado se asemejan bastante.Me gusta mucho tu cocina.Besos.
Me quedo por este blog! Me ha cautivado.....original y distinta.
Triplemente gracias por visitarme, por seguirme y por hacerme descubrir tu blog que es delicioso, original y lleno de humor del bueno.
Yo también me quedo por aquí para disfrutarte.
Hola Papámba,
llego de la mano de Julio y me ha gustado mucho conocerte. Esta entrada es estupenda y sabes? A veces me gustaría que todas pudiéramos ser muchas veces "hombres" para pensar y disfrutar cada cosa que hacemos en su momento.
Un cálido abrazo de domingo sevillano.
Pd: nunca probé las nécoras...Lo tendré en cuenta, de tu parte.
toc-toc, de nuevo:
quería decirte que a mí me ha pasado lo mismo: "iempre pensé que la vida era muy corta, por eso había que vivirla rápido. Un día me di cuenta de que la mejor manera de que se terminara era vivirla rápido. Entonces empecé a vivir despacito. Para que durara más."
Un placer conocerte.
Estoy completamente de acuerdo contigo: me gustaría ver las cosas sin preguntarme qué estará pasando "de verdad". Da para pensar un ratito. Me quedo pensando por aquí. Besos.
No des pistas, si en el fondo nos viene bien...;)
Que estupendo plato, y fácil de hacer y poquitas calorías!
Besos!
Me encanta tu planteamiento, me he reido mucho, jejej.
Muchas gracias por tu visita.
Muxus
Sabes mi niña...no se que tienes pero eres especial, no se si disfruto mas con tus monologos o duos ( tu y tu conciensia) o con tus recetas....pero lo que si se que cada vez que te leo disfruto enormemente, es como un orgasmo mental que me permite saborear las ideas de una mujer inteligente y que sabe plasmar lo que piensa...no solo existe, a mi que se me ha desarrolladao bastante el lado feminino aun no me llega esa iluminasion, siempre dejo todo a medias como buen hombre que soy...sigue asi...con ese humor limpio y sano.....:o)
Un lujo de plato y en esa mesa todo una maravilla.
Una belleza de receta, la mesa también. Papámba me has hecho reír con tus reflexiones sobre los hombres, es cierto, no ven más allá porque no lo necesitan, nos tienen a nosotras para pensar, jajaja,
besos,
Papámba... qué poder decir más? Tener mucha razón... Pero a mi gustar ser mujer, a ti también, verdad? jejeje!!! Mi conciencia seguro que estudió en la misma escuela que la tuya, se asemejan bastante. Venga, tu sigue haciendo platos interesantes y ricos como los de hoy y acompáñalos con tus reflexiones. Besinos.
lo de las semillas con sésamo me parece un buen hallazgo.En cuanto a las mentes masculinas, somos tan distintos, damos respuestas tan diferentes ante la misma realidad que cualquiera diría que pertenecemos al mismo linaje. Esa es precisamente la gracia que tienen, los hombres son estupendos -quitando cuatro pequeños defectillos-.
Jjaja, si son incapaces de masticar chicle y andar a la vez, pobres, pero sí, la vida es tan corta que mejor no discutir y por la paz un ave maría blablabla.
Besos, estaba pensando si conoces a Estela del blog Con el tenedor en la mano.
Sois de la misma onda genial, me encanta leeros.
Yo tambien querria parecerme un poquito mas a ellos pero ¿Que se le va a hacer si nosotras somos, para bien o para mal, la antitesis de la simpleza? Voy a pensar en posibles soluciones mientras me cocino esta deliciosa cremita de verduras.
Gracias otra vez por compartir con nosotros tus acertadas reflexiones y tus ricas recetitas. Un besazo preciosa.
Mi querida amiga, pues como explicarte lo que pienso del tema sin tener que contarte las miles de ideas que se me iban viniendo a la mente a medida que leía tu genial entrada...pues eso que somos así para que le vamos a dar más vueltas hoy.
Pero que lo que está terriblemente claro es que prearas unos platos deliciosos, te felicito.
Un beso muy grandote.
Muy interesante el análisis sobre la personalidad masculina. Mejor todavia
la receta com los hongos!
Saludos
¡Esta es mi Pambi!. La igualdad entre los sesos (y digo sesos) es muy grande, nunca nos llegarán los hombres ní siquiera al talón,
1º: no pueden pensar en hacer dos cosas a la vez,
2º:...no pueden pensar...,
3º: ¡ni siquiera pueden...!,
no somos iguales, nunca lo seremos.
Yo, en mi próxima reencarnación ¡quiero ser hombre! ¿cómo será ver la vida desde el sofá viendo la tele con el mando a distancia en la mano?, mientras mi mujer limpia, compra, friega, lava, cocina, visita a los abuelos, cuida del nieto,trata de crear buena atmósfera en la familia, lima aspereza con los hijos, trata de que los yernos parecan seres perfectos, etc, etc, etc...Ellos se ponen las orejeras, traen el jornal a casa en el mejor de los casos y ¡¡YÁ!!.
Mi querida y admirada Pambi, quizás me pasé un poco con los pobres, porque de todo hay en la viña del Señor, pero de todas formas es lo que pienso por lo que veo a mi alrrededor.
Estoy tomando nota para Navidad y tus recetas sencillas, deliciosas y simples son excelentes.
Gracias por estar aquí y ser como eres. TE QUIERO (también soy tauro, 22 de abril). Mil besos y un abrazo.
Tienes todas la razón, pero también admito que estoy de acuerdo con lo que dice Guille, las mujeres a veces nos complicamos la vida cuando pretendemos que la mente sencilla detecte con la máxima perfección lo que no somos (a veces) capaces de expresar con un pelín más claridad.
Pero también eso es divertido, no?
Me alegra saber que te ha gustado mi paté de aceitunas, hagas con él lo que tu quieras, por supuesto!
Un abrazoooo
Me encanta lo simple,lo directo. Aunque el encanto de la complejidad femenina es insuperable y devastadora para nosotros en algunas ocasiones jajaja...
Tomo nota de los piñones y las semillas de sésamo en la crema pues nosotros en casa no solemos añadirle nada.La Tortilla tiene muy buena pinta también.
Abrazos y saludos afectuosos!
Yo gustar, yo gustar mucho, jejejeje.
Tu entrada me ha recordado esa historia que circuló por internet hace años, acerca de las dos versiones de una misma noche: la del hombre y la de la mujer. Ella se rompía la cabeza al ver el silencio y la cara seria de su pareja, antes y después de tener relaciones sexuales. Y para él, toda la noche se resumía en la siguiente frase: "Ayer perdió el Barça. Por lo menos eché un polvo", jajajaja...
Si es que son así, no se puede evitar..
Pero, bueno, en el fondo, a nosotras gustar, jajaja.
Vuelvo a mirar la omelette, y te digo que me gusta cada vez más.
Besotes.
Es tan creativo tu blog que nunca dejo de sorprenderme al venir. Te aseguro que guardo cada indicación, porque ya las estoy poniendo práctica con mi novia.
Un beso.
HD
Somos multitareas y multipensamientos...(no te digo más que el otro día me caí y según caía iba haciendo la lista de la compra: "patatas, yogurs, cereales, café.....PLOM!)
Sómos, son así.
¡Vive la différence!
(o no)
;)
Besitos
Alguno se va a picar jejej pero es lo que hay, así que a aguantarse toca. me ha encantado.
besitos y sonrisas en forma de patata:-)
Cuánta razón llevas.......a veces siento cierta envidia (allá en el fondo, muy en el fondo de mi ser )por no ser como ellos , por complicarme la vida innecesariamente, por no dejarme llevar, por sentarme sin mas y esperar a que las cosas me vengan rodadas (como el donuts del anuncio).....
Sin embargo estoy orgullosa de ser como soy y no lo cambio por nada, si volviera a nacer pediría “ser mujer”.
Gracias por regalarnos tus textos y tus recetas.
Es un placer visitarte guapa.
Besinos.
Yo no sé el resto de los hombres, pero los que he conocido encajan perfectamente en ese perfil. Y ya ni se te ocurra preguntar en qué piensan porque entonces ya los mataste. Como dice mi marido, se quedan en encefalograma plano.
A veces me gustaría tener la capacidad de no pensar en nada, pero que le vamos a hacer, yo también nací mujer,
La tortillita y la crema geniales, Me encanta como presentaste la tortilla
Besitos
a mi edad puedo decir que es una bendición que sean así, pero no te confíes, de vez en cuando aparece la excepción de la regla...
muy rica tu comida, saludos amiga mia
me encantó tu blog...el comentario de lía da en la diana. Pero me gustaría puntualizar, aunque no lo parezca, ni todos los hombres somos iguales, si todos pensamos en lo mismo...muy rica la crema de verduras. Se la voy a cocinar a una amiga muy especial, ya te contaré...
Estaba leyendo tu interesante conversación con Dios, cuando de pronto, sin motivo aparente saltó el ratón y ahora pasé a leer:
½ calabacín picado.
5 champiñones picados.
5 hongos picados.
1 zanahoria cortada en gajos desparejos.
8 judías verdes cortadas.
6 ramas de brócoli.
¿Habrá metido la cola el Diablo?
Voy a comenzar de nuevo...
Abrazo
Tal cual!
Un Besito Marino
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